Comercio justo: Solidaridad para el éxito comercial

El comercio justo es una novedosa forma de afrontar los negocios, a partir de promover una relación comercial voluntaria y justa entre los integrantes de una cadena productiva que va desde los productores hasta los consumidores.  En el mundo es conocido  como por el término Fair Trade. Es una iniciativa que se orienta a la búsqueda del desarrollo sostenible. Las ideas de negocio deberían comenzar a considerarlo como un elemento diferencial.

El comercio justo se puede percibir como una filosofía que debería regir las relaciones entre el mundo desarrollado y los países emergentes, donde la ética en los agronegocios debería ser sinónimo de éxito comercial. Esta solidaridad comercial se ha convertido en un sello que apuesta por convertirse en estándar internacional de calidad. El consumidor, el eje de la decisión final, prefiere comprar productos en lo que sabe esta contribuyendo indirectamente a promover temas sociales y ambientales.

Un primer grupo de emprendedores ha sabido reconocer las ventajas del comercio justo como valor agregado de sus productos. Dentro de este grupo están empresas dedicadas a productos orgánicos como por ejemplo el banano, el cacao y el café así como otras que comercializan productos étnicos y solidarios. Es una estrategia comercial en la que todos los involucrados salen beneficiados aunque sus detractores señalan que apuntan a nichos de mercado muy pequeños.

Las oportunidades de negocio deben abordarse con objetivos claros. El comercio justo sólo podrá sobrevivir si se comienza a trabajar con productores asociados y consumidores responsable, relacionados por empresarios comprometidos. Generar rentabilidad debería estar en sintonía con el manejo ambiental y la responsabilidad social. Apostar por el comercio justo es apostar por un futuro solidario, bien de todos.

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