El sistema HACCP (Análisis de peligros y de puntos críticos de control) permite identificar peligros específicos y medidas para su control con el fin de garantizar la inocuidad de los alimentos. Es un instrumento que permite evaluar los peligros y establecer sistemas de control privilegiando la prevención.
El sistema puede aplicarse a lo largo de toda la cadena alimentaria, desde el productor primario hasta el consumidor final. Hoy en día, las oportunidades de negocio deben tener en cuenta que su principal ventaja radica en facilitar la inspección por parte de las autoridades sanitarias, siendo compatible con la aplicación de los principales sistemas de gestión de calidad, como la serie ISO, BRC y SQF.
El sistema utiliza siete principios y a partir de ellos deberían generarse nuevas ideas de negocio. El análisis de peligros, la identificación de los puntos de control crítico (PCC), el establecimiento de límites y medidas preventivas, el control y seguimiento de los PCC identificados, el establecimiento de acciones correctivas, el mantenimiento de registros y las auditorías regulares por entidades de certificación independientes.
Un consejo para nuestros emprendedores. Para obtener buenos resultados con este sistema es necesario que tanto la dirección como el personal se comprometan y participen activamente. Además el éxito comercial se asocia con un enfoque multidisciplinario en el monitoreo de los procesos de productivos, en otras palabras del sistema de agronegocios.
COMENTARIOS
Se recomienda analizar minuciosamente el material y comentar sus inquietudes a fin de intercambiar puntos de vista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario