Las buenas prácticas agrícolas (BPA o GAP por sus siglas en inglés) son un conjunto de principios, normas y recomendaciones técnicas, aplicables a las diversas etapas de producción de frutas y hortalizas frescas, para exportación o procesamiento industrial. Tienen carácter preventivo y requieren de la participación de todos los sectores involucrados en agronegocios.
Su objetivo principal es ofrecer productos de calidad e inocuidad, producidos con un mínimo impacto ambiental. Este enfoque viene siendo adoptado internacionalmente ya sea de manera voluntaria u obligatoria. Las ideas de negocios deben considerar como imprescindible su implementación a fin de diferenciar su oferta exportable.
La industria alimentaria hoy viene aplicando el “Análisis de peligros y puntos de control críticos” (HACCP) como respuesta a la demanda de consumidores cada vez más informados y exigentes. El HACCP es una estrategia para combatir las enfermedades transmitidas por alimentos y se ha convertido en estándar internacional de calidad.
Un consejo para nuestros emprendedores que andan en busca de oportunidades de negocio. Las BPA crean un lazo de confianza con el consumidor que prefiere productos de calidad y seguridad comprobados. En la actualidad el éxito comercial está asociado con un actitud responsable sobre la utilización de nuestros recursos. Negocios y seguridad en paralelo.
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